1. Principal aprendizaje de la semana
Dado que estuvimos presentes en el foro sobre la responsabilidad social universitaria, tomaré parte de lo discutido en el mismo, como el principal aprendizaje de la semana.
Lo que llamó mi atención fue como los expositores mostraron el trabajo comunitario como una manera de hacer un cambio en las personas, diferenciándolo de hacer caridad. Esta última es, por decirlo de alguna manera, tomar una vía fácil, tanto para los que necesitan ayuda como para los que la proveen. Lo difícil es crear una verdadera impresión, suficientemente buena para que esas personas decidan tomar mejores decisiones, o evitar que las tomen.
2. Relación con las ideas de otros autores
Lo que de verdad necesitamos
es un cambio radical en nuestra actitud hacia la vida. Tenemos que
aprender por nosotros mismos y* después, enseñar a los desesperados que en
realidad no importa que no esperemos nada de la vida, sino si la vida
espera algo de nosotros. (Frankl, 1991, p.81).
Considero que esta cita enseña algo esencial. Debemos exigirnos
más a nosotros mismos que al resto del mundo. Muchos esperan que la vida sea
fácil, pero no es así y si analizáramos nuestra existencia como un dar y no
como un recibir, quizá alcanzaríamos ese balance que tantos llaman felicidad.
3. Reflexión: Renovación continua
Siempre me ha gustado el baile y por suerte tengo una
habilidad natural en él, a pesar de eso, nunca he tomado la iniciativa de
practicarlo en una forma profesional. Por alguna razón cada vez que lo
intentaba ponía alguna excusa para no hacerlo. Quizá por miedo a fallar (creo
que ese es el peor de los miedos) o también por el hecho de que tengo muchos
intereses distintos y me cuesta decidir entre ellos.
Sé que el baile no
solamente me haría tener una vida más saludable físicamente sino también me
relajaría demasiado y eliminaría el estrés. Por eso me resulta bastante
interesante el hecho de como los seres humanos casi siempre podemos ignorar o
dejar de la lado las costumbres que nos podría beneficiar, pero nos es
demasiado sencillo continuar con las malas. Me encantaría dejar de poner
excusas y simplemente hacerlo, aunque sea sola en casa mientras nadie vea. Al
fin y al cabo, lo haría por mí y para mí.
4. Compartir el aprendizaje
Preguntando a algunos familiares y amigos me di cuenta básicamente todos tenemos algún deseo de crecimiento que hemos reprimido. Escuché desde cosas tan sencillos como aprender a manejar hasta ser actriz. Si le preguntamos a un niño o incluso a un adolescente, sobre el tema, los verbos utilizados serían conjugados en futuro, pero los adultos siempre hablan en pasado. Creemos que ya somos todo lo que podemos ser cuando tenemos familia, casa, carro y trabajo, porque eso predica la sociedad. Nos roban los anhelos y dejamos de escuchar nuestros propios pensamientos.
Referencias
Frankl, Viktor. E. (1991).
El hombre en busca del sentido.
Barcelona: Editorial Herder.
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